lunes, 4 de mayo de 2020
Legaron las moscas al claustro
Hoy, con el claustro lleno de horripilantes moscas,
la cabeza enlatada de ayer domingo en lunes
y los pies doloridos de tanto pisar nubes,
oigo como el Gobierno dicta dos normas frescas.
Suene música mágica dentro el corazón
y se acaben mentiras y altiva cerrazón.
Y yo que me creía inmune a novedades,
en mi monacal celda presiento la infección
de un complicado virus con desinformación.
Pido a la OMS, por el cielo, que diga sus verdades.
Suene música práctica dentro el corazón
y se acaben mentiras y altiva cerrazón.
Hoy, con el plato lleno de pena y de cebolla
y mi boca con sed del agua que trae el olvido,
a las blancas paredes de los libros les pido
el remedio que sane esta sangrante ampolla.
Suene música lógica dentro el corazón
y se acaben mentiras y altiva cerrazón.
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No se ha escuchado tu petición,me temo.
ResponderEliminarEra retórica.
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