DESAMOR
Triste boca, te amé por sugerente;
tus besos, hoy mentira y desconcierto
son dios de la pasión en punto muerto
pues su música vibra diferente.
Disfrazada de negra penitente
la luz de tu mirada vuelta noche
hace del convivir un mal fantoche
y del gris desamor, yerma simiente.
En la hora del ocaso del amor
la culpa mejor verla repartida
entre debilidades personales,
la edad y algún oculto resquemor
y así tener el alma seducida
por nuevas aventuras pasionales.
Bonitas palabras, aunque teñidas de resignación. Hermoso como las cosas tristes.
ResponderEliminarGracias.
EliminarMuchas gracias por participar, Julio. Un saludo.
ResponderEliminarGracias a ti por aceptarlo. Un saludo.
EliminarProfundos e intensos versos para señalar la decepción, la aceptación y el desamor. Un abrazo
ResponderEliminarAbrazo agradecido el mío.
EliminarBonito poema ideal con el tema.
ResponderEliminarUn saludo!
Muchas gracias
EliminarHola Julio bien versado ese desamor. Un saludo.
ResponderEliminarHola Ainhoa, gracias.
EliminarHermoso poema, me encantaron esos versos que dicen: Disfrazada de negra penitente, la luz de tu mirada vuelta noche: el desamor más claro imposible en estas palabras.
ResponderEliminarTe felicito Julio, un abrazo.
PATRICIA F.
Muchísimas gracias. Me alegra saber de tu buena lectura.
EliminarLas culpas siempre están repartidas cuando las relaciones son normales (sin violencias me refiero). Me ha gustado mucho tu poema con rima y ritmo. A mí me resulta imposible.
ResponderEliminarUn abrazo.
¡Uf! eso de las relaciones violentas tienen poco de amor y cuando acaban tampoco de desamor.
EliminarSuena a tango y desengaño. Suena a algo que pasó y dolió pero que dejó poso en lo profundo.
ResponderEliminarUn abrazo.