Las primeras imágenes borrosas,
mencionan el recuerdo de aquel rostro
que alguien teme ya nunca más besar.
Después viene el verdor de las manzanas,
el color y el sabor de la esperanza.
Le siguen la Piedad y sus tres cruces
llamando a la conmiseración
por un dolor que iguala y justifica.
¿Y esto es el video-arte? te preguntas.
Y en la interrogación llevas la búsqueda
del tesoro de su genial belleza.
Luego van impactantes los desnudos
con la sensualidad del sexo limpio.
Terminando nos vemos en cien espejos
reflejos de los ángeles sin cuerpo.
Y al final la mayor demostración,
la gloriosa belleza del lenguaje.
Sí que era video-arte, te contestas.
(Imágenes de Pixabay)
Todo es relativo...hasta que nos conmueve,sea arte o no para los demás.
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