LXIV
Enterramos la sardina muerta
como ávidos recipientes de ceniza.
Un instante para pecar contra Dios
un momento para el arrepentimiento
y ya no nos quedó tiempo para la vida.
El abismo vino con el chupete
y chupa que te chuparé nos fue llamando.
Estaba ahí en el primer beso
y besa que te besaré le fuimos ignorando.
Con los hijos le gritamos
y grita que te gritaré nos fue acallando.
Una tarde todo es vértigo
como acantilado sobre el océano.
Ya no hay razón para temer al agua
ni hay motivo para pedir perdón.
Lo que resta de la vida, es muerte y olvido.
Es triste, a veces siento éso mismo, que lo que resta de vida es muerte y olvido.
ResponderEliminarBesos.
Demasiada muerte y más olvido este año. A ver si el verano nos trae alguna alegría.
EliminarBesos.
Ya has desaparecido de mi muro. Ya te escondes. la muerte es la vida al revés. El colofón de lo bien vivido o al menos de lo vivido.La vida es aquello que tejemos cada día, bueno o malo solo son instantes. Pero otros deslumbran, otros ciegan de belleza, otros llenan los cuerpos de estrellas de pasión.
ResponderEliminarNo me escondo, descanso y procuro escribir. Cuando no soporte más la soledad virtual volveré a la red social.
EliminarUn abrazo y feliz verano.