sábado, 28 de abril de 2018

ADAGIO DEL NACIMIENTO




El mundo suena a calma
Olvida las cínicas palabras
Callan los truenos rabiosos
Se despejan las nubes carcelarias

Mis lágrimas felices
gotean cristalinas y puras 
Isla de paz en el mar tenso
(el sueño del recién nacido)

Susurra la vida su magia
El amor paternal triunfa
más potente que la ira diaria
Dar a luz dar a milagro
Nacer al ritmo armonizado
plegaria de tempo mágico

Adagio de deseo y miedo
Fe en un Dios bondadoso
Oración apenas pronunciada
repetida y temblorosa

Mi corazón se para a saltos
Algo interno sabe de sobra
con intuición de profeta
que el rayo se acerca al árbol

7 comentarios:

  1. Un adagio precioso, no podía ser pensado y creado en otro tempo.

    ResponderEliminar
  2. Tus versos tienen el tono y la cadencia de un adagio.
    Ese final me estremece,porque tengo el corazón así.
    Perfectamente elegido ese Shostakovic.
    La música y la palabra de la mano,en una hermosura lánguida.

    Besos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Bueno, me abrumas.
      Me alegro que te haya gustado.

      Besos.

      Eliminar
    2. Es que soy muy intensa.
      Me alegro yo de volver a leer versos que me estimulan y me hacen disfrutar de la poesía.
      Es un lujo en este mundo tan sórdido.

      Eliminar
  3. "Mi corazón se para a saltos
    Algo interno sabe de sobra
    con intuición de profeta
    que el rayo se acerca al árbol"
    Estos versos, cierre perfecto para tu poema, vívidamente existencial, y al parecer paradójico, pero así es la vida. Un abrazo. Carlos

    ResponderEliminar

Mensajes moderados, pronto publicados. Gracias.