ALMAS DE ESTATUA (narrado)

 

Durante mis paseos matinales, fuiste lugar de obligado recorrido. Erosionada estatua de sal, mujer de Lot que se atrevió a lo expresamente prohibido: mirar la destrucción de Sodoma. Escuchaba salir de ti melodías. De forma contradictoria, te sentía cantora de himnos alegres, alma curiosa de mujer apresada en eterna sal, advertencia a mujeres osadas, que en adelante sabrían del castigo por mirar distinto.

Pero la sorpresa llega con la luz, y un terremoto resquebraja hoy esa secular cubierta salina tuya, dejando oír tu estruendosa risa, fuente de músicas liberadoras cuyos ecos, en mis paseos intuía. Se deshacen los terrones de sal, se disuelven las dudas y comprendo claro y cierto: miraste y viste la falsedad de los dioses, intuiste la tramoya y su teatro de aquellos hombres justos, te castigaron por ello, no podían consentir los poderes una vergüenza con publicidad y destruir la causa de la femenina dominación.

Ahora tu alegría se hace un ejército de almas de estatua, recorre hoy los caminos digitales como revolución igualitaria marcando el paso a los vientos motor de nuestras nuevas velas, en navíos bogando hacia una fraterna humanidad.

Erosionada estatua de sal

cantora de alegres himnos

Advertencia a mujeres osadas

del castigo por mirar distinto

Un terremoto resquebraja hoy

esa secular cubierta salina tuya

dejando oír tu estruendosa risa

fuente de músicas liberadoras

Viste la falsedad de los dioses

intuiste la tramoya y su teatro

No podían consentir los poderes

una vergüenza con publicidad

Un ejército de almas de estatua

recorre hoy los caminos digitales

marcando el paso a los vientos

motor de nuestras nuevas velas.