martes, 27 de junio de 2023

CAMINANDO 3º

 


Dice mi general, sin ninguna duda los artistas son unos indecentes. Asiente mi capitán gritando, los poetas mejor los eliminamos por vagos e inútiles. El ministro del gobierno, callado concede, el ministro eclesiástico, perdona y bendice. El cuerpo del poeta, trata de desaparecer. Su ángel, sin embargo, escapa a un refrescante lugar, creado por la humana capacidad simbólica, tan en desuso estos días. Mientras las partes palpables de su ser se difuminan con lentitud, su espíritu de artista pesca en el mar del símbolo y la trascendencia, ejemplo claro de lo abierto. Feliz con la pieza, incluso en este momento de dolor moral y corporal, la humilde elevación conseguida sobre el lodo cotidiano le hace sonreír. Abrazado al resultado del esfuerzo, éste ángel siente al fin, que es algo, y no solo, la potencia de ese algo. Dice como poeta que ahora su alabanza se dirige a este ámbito recién conquistado. Rompe con el engaño de las tradiciones culturales que esclavizan. Desaparecen de su mente los hábitos viciosos y la voluntad de medio vivir a la deriva. Jamás olvidará la alegría de ser tierra invadida por un espíritu creativo. Y Su rezo es: «¡Espíritu, ojalá vuelvas a visitarme pronto! Sé que el dolor y la marginación no tardarán, te necesitaré.»

8 comentarios:

  1. Los señores de la guerra no entienden de palabras ellos son hechos, materialización física del dolor y la devastación, la misma en la que vivimos la mayoría de los que no empuñamos un fusil, pero sobrevivimos en un campo de minas para los sensibles que nos evadimos o intentamos trascender en palabras y si ese ángel del que hablas, efectivamente viene a visitarnos y nos lleva lejos entre sus alas …a ese mundo en el que las letras se unen para decir justo lo que queremos decir, en la forma en la que debe ser dicho, morimos de felicidad ; )

    Un abrazo!

    ResponderEliminar
  2. Para las instituciones jerarquizadas con normas absolutas es imposible que puedan comprender y aceptar a los artistas. Seres libres, dotados de una prodigiosa imaginación que los hace evadir la realidad. Palabras peligrosas: libertad, evasión, creación.
    Los políticos frente a la disyuntiva, se mueven según el péndulo de los intereses inmediatos. Los clérigos, no dicen nada mientras las reflexiones de los artistas no toquen sus postulados sagrados.
    El ángel del poeta escapa a la naturaleza y es mar y es tierra.
    Abrazos Julio

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Magnifico comentario. Me anima enormemente a seguir escribiendo.
      Abrazos a montones.

      Eliminar
  3. como siempre ministro eclesiástico cobarde se escuda en su creencia y deja de lado toda bondad de ser humano, espero que en el infierno pague sus pecados, y bien por el poeta que paso a un plano superior, el resto no existe y no vale la pena mencionarlos...
    misma historia, distintos actores, todo es cíclico...



    saludos

    ResponderEliminar

Mensajes moderados, pronto publicados. Gracias.