DURACIÓN Y ENCUENTRO
En el laberíntico espacio de la duración
relojes que se reblandecen
con manecillas víctimas de un milagro
miden el tiempo del ensimismamiento
y el mundo te mira y tú miras el amor
En el lujurioso tiempo del encuentro
nervios que se estrangulan
con sinapsis al máximo de excitación
recorren los espacios interestelares
y astros te acarician y tú te expandes
En el tristísimo acto de sobrevivir
órganos excretando toxinas
con funciones críticamente alteradas
piden voluntad de vivir
y todo te golpea y tú sufres la alienación
Amigo Julio, el tiempo es ondulante, cambiante y nos cambia a todos. El tiempo es el gran escultor de cincel implacable.
ResponderEliminarBuen poema, te felicito.
Muchísimas gracias.
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