En mi noche
millones
son amantes.
Con
la pequeña luz,
de
sus amores,
acumulo
brillantes rayos blancos
que
en mi redondo ser
son
llamaradas.
Y
en mi noche
reflejo
luz humana.
Plenilunio,
visión
de mil instantes.
Las
caricias de amor,
juntas
en ondas,
resumidas
en limpios rayos blancos
que
ha de guardar el sol
en
sus entrañas.
Y
en mi día
envío
al sol la vida.
En esa imagen la luna besa al mar.
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Qué contenta estará la luna con este poema!
Es un hermoso homenaje.
El viernes por la noche estuve un buen rato mirando la luna llena,estaba espectacular.
Besos lunáticos.
Muchos besos, muy lunáticos.
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